#MonkMode
En el "Get Ready" de esta semana: dormir como estatus, YouTube como la nueva TV, conventos en auge, el revival de Polo y la serie teen que obsesionó a los +30.
#MonkMode.
La semana pasada hablamos de los soft reset trips y de los reading retreats. La idea es la misma: descansar, alejarse de bares y turismo, y volver renovados. También mencionamos el great lock in, ese encierro de septiembre a diciembre para enfocarnos en estudiar, entrenar o proyectos. ¿Por qué hago esta intro? Porque este verano hubo un plot twist inesperado.
La tendencia de alejarse y relajarse fue un paso más allá. Mientras el año pasado todas hablaban de su Brat summer y fiestas, este verano las jovencitas se fueron a… conventos. Sí, conventos y monasterios. La nueva aspiración es estar en silencio, lejos de redes, dating apps, reservas imposibles y casas en la playa. Lo llaman #MonkMode y no hace falta irse hasta India al estilo Julia Roberts en Comer, Rezar, Amar.
Todo empezó con un video de la usuaria @mc667868 en TikTok. Contó que el verano pasado había reservado fácil un retiro en un convento (“solo le mandás un mail a las monjas”), pero cuando quiso repetir este año le dijeron que estaba todo lleno por tres meses y que había lista de espera. El clip superó las 700K views y los comentarios lo volvieron tendencia. Desde ahí aparecieron decenas de testimonios de chicas que quisieron anotarse en conventos en Italia o en Upstate y ya no había lugar. Más difícil que conseguir mesa en un Michelin en Nueva York.
La religión no es el centro de esta tendencia, lo que importa es el silencio y la rutina compartida. Pasar los días en la huerta, leer, dormir, volver a lo básico y tener una vida austera. En Francia incluso ya hay monasterios recibiendo jóvenes, incluso estudiantes que preparan exámenes.
En la cultura pop también aparece: White Lotus incluyó un monasterio en su última temporada.
¿Por qué este boom? En parte, por agotamiento. Según encuestas, casi 250.000 estadounidenses sufren burnout antes de cumplir 30. En ese contexto, pasar unos días sin notificaciones, sin dating apps y en completo silencio ya no suena extremo, suena lógico.
La tendencia dice mucho de este momento cultural. No es escaparse dos semanas a Bali ni hacer turismo espiritual para Instagram. Es apagar todo y vivir unos días en silencio y sin lujos. Y parece que cada vez más jóvenes necesitan poner el celular en modo avión.
🗞️EXTRA, EXTRA 🗞️
• Cómo los podcasts (y la cirugía estética) están moldeando los estándares de belleza masculina: La manosphere es un universo online de podcasts, foros y creadores que giran alrededor de la masculinidad, el rendimiento y la auto-optimización. Ahí se mezclan desde consejos de gym, dietas y suplementos hasta biohacking y hormonas. Y ahora, ese mismo espacio también está impulsando la normalización de la cirugía estética en hombres.
• El crecimiento de la ecoanxiety: La ecoanxiety es ese miedo crónico al colapso climático. Jóvenes en Fiji, Brasil o Nigeria viven ciclones e inundaciones cada año, mezclando duelo por lo perdido y miedo al futuro.
• Explicación del nuevo trend de TikTok “Unfortunately I Do Love”: se trata de armar una lista de gustos, manías o defectos que te definen, aunque no sean cool ni estéticos. La gracia es que generan engagement, uno se muestra auténtico y generan debate.
El negocio del sueño.
Un buen descanso ya no es solo una necesidad, se convirtió en un símbolo de estatus, un lujo aspiracional y una señal de que uno se preocupa por su salud. Pero, ¿cómo y cuándo cambió nuestra percepción del sueño? La revolución comenzó en 2015 con el lanzamiento de un pequeño dispositivo: el Oura Ring. Esta semana la empresa anunció una nueva ronda de inversión que la valúa en $10 mil millones de dólares, vendió 3 millones de unidades en el último año y planea facturar $1.5 mil millones de dólares en 2026.
El Oura no es solo un anillo, es el invento de tres finlandeses: Petteri Lahtela, Markku Koskela y Kari Kivelä. Con su pasión por la tecnología y la salud, se dieron cuenta de algo fundamental en 2013: el mercado de los wearables se centraba únicamente en contar pasos y calorías, ignorando por completo el pilar de una vida saludable: el sueño.
Así nació la idea de un dispositivo que monitoreara el descanso. Y decidieron que el formato perfecto no era un reloj, sino un anillo. Tras explorar diversas opciones, descubrieron que el dedo ofrecía lecturas biométricas mucho más precisas que la muñeca. En 2015, lanzaron su primer modelo con una campaña de Kickstarter. La respuesta del público fue arrolladora, recaudando $650 mil dólares en tan solo 24 horas. Esto validó el concepto y les dio el empujón inicial para empezar a producir.
Aunque habían validado su idea, los inicios no fueron fáciles. Muchos inversores dudaban del proyecto: “¿Por qué un anillo y no un reloj?”. A pesar de la precisión de sus sensores, los fundadores la pelearon por años para conseguir financiamiento. El enfoque en el sueño era visto como un nicho y el primer anillo era más grande y menos discreto que los modelos actuales. Los inversores temían que el público no lo aceptara.
Pero los fundadores no se rindieron. Escucharon el feedback y se pusieron a trabajar en miniaturizar los sensores para hacer un anillo más delgado y cómodo. Y en 2018, lanzaron la segunda generación de su producto. El cambio fue total. Con este nuevo diseño, no solo convencieron a usuarios, sino también a grandes inversores como Michael Dell, fundador de Dell, y levantaron una ronda de financiamiento de $20 millones de dólares. Ese capital les permitió expandir su producción y llegar a mercados internacionales, como Estados Unidos y Asia.
El año 2020 lo cambió todo. Con la llegada de la pandemia, un estudio de la Universidad de California en San Francisco descubrió que el Oura Ring podía detectar síntomas del COVID-19 con días de anticipación gracias a la medición de la temperatura corporal nocturna. La NBA adoptó el anillo para monitorear la salud de sus jugadores en la famosa “burbuja” de Orlando. Las ventas se dispararon, alcanzando las 600,000 unidades y Oura Ring fue nombrado uno de los “Mejores inventos de 2020” por la revista Time.
Pero el verdadero punto de inflexión llegó cuando las celebridades y figuras influyentes, desde Kim Kardashian hasta el Príncipe Harry, empezaron a usar el anillo de forma orgánica. La simple imagen de Harry con su Oura Ring generó más de $10 millones de dólares en publicidad gratuita.
El Oura Ring se convirtió rápidamente en el accesorio favorito de CEOs y emprendedores, como Jack Dorsey, fundador de Twitter. Para ellos, no es solo un gadget, sino una herramienta para optimizar la salud y el rendimiento. Y para el resto del mundo, llevar un Oura Ring se volvió un símbolo de autoconocimiento y del compromiso con el bienestar. De repente, preocuparse por la calidad del sueño ya no era algo “raro”, sino un signo de inteligencia.
Hoy, el “negocio del sueño” es una industria multimillonaria. El Oura Ring fue un pionero, impulsado por una cultura global que valora cada vez más el autocuidado y el bienestar. El éxito de Oura Ring atrajo la atención de gigantes tecnológicos, y aunque los fundadores rechazaron las ofertas de adquisición, la competencia ya está acá. Empresas como Samsung lanzaron su propio anillo, el Galaxy Ring, y startups como Ultrahuman están ganando terreno. A pesar de la nueva competencia, Oura mantiene su liderazgo con más de 150 patentes, una década de experiencia y colaboraciones con grandes tiendas como Amazon y Target.
Hoy en día, el Oura Ring se consolidó como un ícono de diseño y estilo de vida, alineándose con la tendencia del “quiet luxury”. Su éxito demuestra cómo un proyecto que empezó con la pasión de tres amigos se convirtió en un referente mundial, transformando un concepto subestimado como el sueño en un pilar fundamental de la salud moderna.
🗞️EXTRA, EXTRA 🗞️
• Facebook lanza un asistente de IA para citas para competir con Tinder y Hinge: La app anunció un par de funciones nuevas para combatir el “swipe fatigue”: un asistente con IA que te ayuda a encontrar a la persona ideal (ej. “Estoy buscando un gymbro en Colegiales”), y una función llamada “Meet Cute” que te conecta con un match sorpresa cada semana.
• Vercel anunció que empieza a contratar talento en Argentina: Vercel, la empresa privada fundada por Guillermo Rauch y valuada en $9 mil millones de USD, es una plataforma en la nube que permite a los desarrolladores crear, lanzar sitios web y aplicaciones web.
La nueva TV: YouTube es el rey del streaming.
En Febrero de este año, el CEO de YouTube anunció que más gente consume YouTube en su TV que en su celular. Parte de esto lo explica el crecimiento del consumo de Podcast (+44% vs. 2024), donde YouTube se posiciona como la plataforma preferida (40%) con más de la mitad de los usuarios diciendo que prefieren ‘ver’ los podcasts en lugar de ‘escuchalos’. Según un reporte de la agencia Havas, Latinoamérica podría ser la región del mundo con mayor consumo de podcast y programas de streaming en 2027 si continúa creciendo como en los últimos años.
En Estados Unidos, un reporte de Nielsen que mide la cantidad de tiempo consumido en TV por medio, muestra a YouTube como la plataforma de streaming más popular por sexto mes consecutivo, por encima de Disney y Netflix.
Aunque los derechos para transmitir eventos deportivos parecen ser lo único que mantiene vivos a los canales de TV tradicionales, las plataformas de streaming están entrando a competir fuerte. En el caso de YouTube, en Brasil tienen derechos para partidos del Brasileirao en el canal CazéTV, y hace un par de semanas transmitieron gratis un partido de la NFL (fútbol americano) que rompió el récord de audiencia en un livestream de YouTube. Casi 20 millones de personas, incluyendo más de 1 millón fuera de los Estados Unidos, con la participación de MrBeast y IShowSpeed entre otros creadores de contenido.
En este contexto, donde el consumo y generación de contenido oscila entre los videos cortos estilo TikTok, Reels, YT Shorts, y videos largos estilo podcast o livestreams de 1-3hrs, las marcas que mejor aprovechan esta oportunidad están haciendo anuncios poco convencionales que adoptan características del contenido endémico de cada plataforma para ser más relevantes para un público que hoy puede oler muy fácil la falta de autenticidad. Les dejo dos anuncios de marcas de autos que explotan el contenido ‘long-form’ (anuncios de más de 60 segundos) de maneras distintas:
(1) Volvo promocionando su modelo EX90 con una historia que te emociona ;
🗞️EXTRA, EXTRA 🗞️
• Anthropic lanzó su campaña “Keep Thinking”: La empresa de IA que desarrolla Claude, competidor de ChatGPT y Google Gemini, publicó el video de su primera campaña y el público la comparó con los mejores años del marketing de Apple. Una obra de arte que inspira, humaniza la tecnología y combate el pesimismo sobre el presente y el miedo a que la IA reemplace a las personas.
• Prada lanzó su nuevo corto Ritual Identities protagonizado por Scarlett Johansson y dirigido por Yorgos Lanthimos, donde la actriz aparece en múltiples versiones de sí misma. Otro ejemplo de cómo las marcas usan YouTube y sus presupuestos para crear campañas con valor y destacarse en vez de seguir el trend del día en TikTok o Instagram.
El regreso del lujo americano.
El sweater con la bandera americana que Ralph Lauren lanzó en 1989 volvió a ser un hit 36 años después. Hoy lo ves en campus universitarios, playas de la costa este, usado como guiño nostálgico y preppy. ¿Lo curioso? En plena grieta política, los jóvenes lo adoptan aunque dé “MAGA vibes”. Pero no les importa la carga ideológica, lo que está de vuelta es el American style.
Mientras el lujo europeo se pelea con ventas estancadas y clientes hartos de aumentos, Ralph Lauren hizo lo contrario: +33% en acciones este año, +11% en ingresos el último trimestre, creciendo en EEUU, Asia y Europa. Su receta se llama “inclusive luxury”: un lujo americano que puede ser un par de medias de $12 USD o un reloj de $320 mil USD. Y si no querés ropa, te podés sentar a tomar un latte en Ralph’s Coffee.
El revival llega en el timing perfecto: una cultura atravesada por la nostalgia y lo aspiracional. Ralph vende Hamptons, country clubs, glamour vintage de Hollywood y ese aire old money. Fantasía de “Made in America” (aunque produzca en otro lugar).
El estilo preppy es la tendencia de esta temporada: mocasines, cardigans, cashmere, polos y camisetas de rugby. En Pinterest las búsquedas de “preppy outfits” crecieron +47.000%. Pero Ralph no corre atrás de la moda: es la referencia. Sus polos y rugbys nunca dejaron de ser el core de la marca, y si son vintage, mejor todavía.
Ese archivo es oro en tiempos Y2K (Year 2000s). Kylie Jenner revivió un look de pasarela del 2000 en Italia, Gigi Hadid salió con una cartera icónica. Ralph hasta lanzó su línea vintage para competir con el resale premium. Lo viejo está de moda, y nadie mejor para capitalizarlo.
También fue pionero en tech: QR en etiquetas, espejos inteligentes y, en 2022, Fortnite. Skins digitales, drops físicos y hasta una isla propia llamada Race to Greatness. Rediseñaron el caballo de Ralph por primera vez en décadas para adaptarse al universo gamer. Un movimiento phygital que conecta Gen Z con el ADN de la marca.
Pero Ralph no vende solo ropa. Construyó un universo: cafés, US Open, Wimbledon, los uniformes de Team USA en las olimpiadas. Hasta Taylor Swift eligió un vestido Ralph Lauren para anunciar su compromiso. ¿Hay algo más americano que eso?
Y detrás de todo, la mano de Patrice Louvet, CEO desde 2017. Cerró puntos de venta débiles, bajó la dependencia de China, recortó descuentos y enfocó la marca en 30 ciudades clave. Sus outlets, lejos de ser low-cost, atraen clientes con ingresos promedio de $100K. Y su fórmula es clara: 70% clásicos eternos (polos, sweaters, blazers), 30% moda de temporada. Coherencia que da estabilidad mientras otros juegan al todo o nada.
En un mercado donde el lujo europeo está en declive, Ralph encontró su lugar. No inventó nada nuevo: mezcló raíces con modernidad. Nostalgia old money, estética preppy, archivos vintage, apuesta digital y retail aspiracional. Lo que vende Ralph no es solo ropa. Vende el sueño americano.
🗞️EXTRA, EXTRA 🗞️
• El regreso triunfal de los brackets de metal: Los brackets pasaron de ser motivo de bullying a un accesorio de moda. Ahora los adolescentes los eligen por ser personalizables, cool y con ese toque de autenticidad que conecta perfecto con la nostalgia Y2K.
• El efecto WAG en la Formula 1: las WAGs (wifes and girlfriends) de los pilotos ya son referentes de moda. La más comentada es Alexandra Saint Mleux, novia de Charles Leclerc, lo que usa se agota, pasó de agotar un vestido de $300 en Revolve a ser musa de marcas y capitalizar cada look.
• Nike y Skims lanzan una nueva línea NikeSKIMS: En plenos rumores de IPO, la marca de Kim Kardashian se asoció con Nike para lanzar juntos una marca. No es una collab más, es una línea propia al estilo ‘Jordan’.
La serie teen se causó adicción a los +30.
La semana pasada se resolvió la duda que tenía a medio internet en vilo. En chats de amigos, en el trabajo, en TikTok: ¿Team Conrad o Team Jeremiah? Y sí, ya hay respuesta. Pero ahora, ¿quiénes son? Lo aclaro porque calculo que el 98% de ustedes no vio la serie (yo tampoco, bien ahí por no sufrir el drama). The Summer I Turned Pretty fue el tema del verano y hasta marcas se subieron a este hype. Lo increíble es cómo un triángulo amoroso adolescente terminó atrapando a mujeres +30.
Basada en los libros de Jenny Han, la serie de Prime Video triplicó su audiencia desde 2022 hasta la última temporada. Para Gen Z es romance aspiracional: playa, casas de verano, amores imposibles y ganas de ser vistos. Para los millennials es un revival emocional, volver a sentir esos primeros amores dulces, intensos y dolorosos que te marcan para siempre.
Los psicólogos explican que esta serie engancha a las +30 porque activa la identificación: los fans proyectan deseos y heridas en los personajes, por eso ser Team Conrad o Team Jeremiah se vuelve tan personal. La música hace el resto, nada más y nada menos que Taylor Swift como banda sonora del drama, más clásicos nostálgicos como Landslide o Wild Horses que disparan nostalgia en millennials y Gen X. Para los jóvenes, descubrimiento; para los demás, déjà vu emocional.
El fenómeno desbordó la pantalla: fiestas temáticas, tragos con nombres de personajes, watch parties en bares llenos como si fuera el Super Bowl. Hasta Tina DiCenso, una mamá de 54 años, se volvió estrella en TikTok con sus reacciones. Y hasta la casa real donde se filmó en Carolina del Norte duplicó su valor de $1.5 M en 2011 a más de $3 M hoy.
The Summer I Turned Pretty no es solo una serie juvenil. Es un espejo que mezcla fantasía, nostalgia y comunidad. Una prueba de que lo que las mujeres desean, ser vistas, llorar, ilusionarse, puede mover industrias enteras y convertirse en fenómeno cultural sin importar la edad de los personajes.
🗞️EXTRA, EXTRA 🗞️
• Kamala Harris lanzó su newsletter en Substack: el 19 de septiembre publicó su primer post publicitando su libro 107 Days, donde repasa su derrota y admite errores. Más allá de su política, esto muestra cómo Substack sigue creciendo como espacio para opinar y tener una voz directa, sin intermediarios.
• Por que tus 20s importan: En este podcast hablaron sobre la importancia de los 20s, basado en el libro The Defining Decade. Mencionan que no son años para “pasar el rato”, sino para construir experiencias, conexiones y decisiones que te marcan el futuro.
• Bad Bunny cerró su serie de 31 shows en el Coliseo de Puerto Rico con un concierto transmitido en vivo que rompió récords de audiencia en Amazon Music, Prime Video y Twitch.