Marketing en Tiempos de Política
En el 'Get Ready' de hoy: cómo Mamdani pasó del 1% al 56% en NYC; Starbucks intenta volver; por qué lo vintage es el nuevo aspiracional; “The Life of a Showgirl” para no-swifties y muchos temas más!
De desconocido a favorito: el secreto de la campaña de Mamdani.
Esta vez no vamos a enfocarnos en el marketing de una marca o producto, sino en una campaña política. La imagen, el diseño, y la comunicación pueden cambiar los resultados de una elección y volver popular a alguien que hace meses era un desconocido.
En julio de 2025 se votó en las primarias para alcalde de Nueva York. Zohran Mamdani, de 33 años, arrancó con apenas 1% en las encuestas de febrero. Cinco meses después sorprendió con un 56%.
No voy a hablar de política, y esto no es una señal de apoyo a Mamdani o sus propuestas. Lo que me interesa es analizar su campaña de marketing y ver qué aprendizajes podemos llevarnos.
1/ Identidad Visual: No usa los típicos colores y tipografías que son “seguras” para los candidatos, como el azul corporativo. Todo lo contrario: el logo Zohan Mamdani está inspirado en los carteles pintados a mano de los minimercados clásicos de Nueva York, en los taxis, en las MetroCards, los puestos de comida y en pósters de Bollywood. Colores llamativos que se sienten familiares para los habitantes de la ciudad, y que parecen un póster cool de una banda más que de una campaña política.
2/ Videos que eran entretenimiento, no propaganda: Cada clip es un sketch, un usuario más siguiendo un trend o un anuncio de una marca de consumo masivo: entretenido y natural. Mamdani aparece comiendo papas fritas, en la calle, jugando al básquet, corriendo una maratón. Pero siempre hablando de sus propuestas, con hip hop o Gwen Stefani de fondo. Autenticidad pura.
3/ Estética audiovisual cinematográfica: Todos los videos comparten un look: filtros cálidos, planos cercanos, buenas transiciones. Más humanos que políticos. Esa coherencia estética transmite calidez y cercanía. Dato: su mamá es cineasta y se nota la mano. Logró diferenciarse en el feed y conectar con los votantes por el lado de la nostalgia.
4/ Mensaje claro y repetido hasta el cansancio: Nada de PDFs con 10 puntos ni discursos abstractos. Sus frases son simples, casi de charla entre amigos: “congelar los alquileres”, “guarderías para todos”, “colectivos gratis”. Ideas fáciles de entender, repetir y recordar. Las entiende tanto un abuelo en Queens como un adolescente en TikTok.
5/ Multilingüe y multicultural: Nueva York es una ciudad cosmopolita con mucha variedad de comunidades inmigrantes. Por eso la campaña no se limitó al inglés: grabó en español, hindi, urdu y bengalí. No importa si el acento era perfecto, importa el esfuerzo. Con esto logró que sus mensajes circularan en grupos de WhatsApp familiares, parques y charlas de barrio.
6/ Carisma y autenticidad: No fue solo diseño. Mamdani se muestra vulnerable y real. Cansado y transpirado después de correr una maratón, caminando y abrazando vecinos, frenando para selfies. No parece armado para la foto; se siente natural y eso lo diferenciaba de los típicos spots políticos.
7/ Comunidad y co-creación: La campaña dejó de ser solo “de Mamdani”. Jóvenes crearon edits, canciones como Everybody rank Zohran, y merch como las remeras Hot Girls for Zohran. Se volvió un movimiento colectivo: más de 50.000 voluntarios golpeando 1,6 millones de puertas.
8/ Calle + internet: La campaña integra lo digital y lo físico. Caminatas, town halls, timbreo, pósters pegados en subtes, minimercados y supermercados. Merch repartido en la calle. Likes que se convierten en voluntarios, y seguidores que se convierten en votantes. Llegó a organizar una búsqueda del tesoro por todo Nueva York donde participaron más de 4.000 personas.
9/ Earned media y apoyos: Con la viralidad en redes, la prensa no pudo ignorar el fenómeno. The Cut, Guardian, Curbed: todos escribieron sobre él. Se sumaron apoyos de AOC, Bernie Sanders y hasta comediantes e influencers. Todo gratis, mientras sus rivales gastan millones en anuncios de TV.
El secreto no fue subir videos a TikTok ni un logo cool. Fue alinear mensaje, estética y autenticidad en todos los frentes y alejarse lo máximo posible del molde: no imitó a otros candidatos ni el “manual” de campaña, evitó lo corporativo y la solemnidad, y se paró en la vereda opuesta, humano, local, remixable. Cuando lo que decís, cómo lo decís y cómo te mostrás están en sintonía con la vida real de la gente, la campaña deja de parecer marketing y se convierte en movimiento. Nos guste o no lo que propone, su estrategia de marketing funciona y deja aprendizajes valiosos para cualquier proyecto o marca. Esta semana lanzó un anuncio durante el reality show “The Golden Bachelor” y otro el 3 de Octubre haciendo referencia a “Mean Girls”.
🗞️EXTRA, EXTRA 🗞️
• La startup financiera Ramp lanza una campaña con Kevin de The Office | La publicidad de Ramp con Brian Baumgartner, el mismísimo Kevin Malone de The Office, apunta directamente a lo engorroso de los reportes de gastos y la burocracia financiera en las empresas. En el spot, el actor retoma el humor de su personaje, el contable medio torpe, para exagerar todas las frustraciones que genera el papeleo manual. La idea central de la campaña es mostrar ese quilombo administrativo para luego contrastarlo con la solución que ofrece la plataforma de gestión.
• Gucci publicó un cortometraje para presentar su nueva campaña | El film “The Tiger” es una especie de drama familiar oscuro y teatral, protagonizado por figuras como Demi Moore, que se estrenó en la Semana de la Moda de Milán. En lugar de un desfile tradicional, la marca usó esta narrativa audiovisual para presentar la colección “Gucci: La Famiglia”, centrada en el poder, el estatus y las dinámicas internas de una familia ficticia de la moda. De esta forma, Gucci apuesta por un storytelling que trasciende la pasarela, fusionando cine, cultura pop y alta costura.
• Crearon una webapp para vandalizar los afiches de Friend | La startup de inteligencia artificial Friend invirtió más de un millón de dólares para empapelar el metro de Nueva York con una campaña publicitaria para su wearable de IA que promete ser un “amigo”. Sin embargo, la campaña generó una fuerte reacción negativa, con muchos neoyorquinos vandalizando los anuncios con mensajes que critican a la tecnología por promover la soledad y la vigilancia. El CEO de la empresa, Avi Schiffmann, admitió que la controversia fue intencional, buscando provocar el debate público sobre la IA en un lugar donde ya existe un alto escepticismo.
Starbucks to basics.
Starbucks nació en 1971 como un local chiquito en Seattle donde solo ofrecían café en grano para llevar. El salto cultural llegó cuando Howard Schultz volvió de Italia enamorado de sus bares y espressos. Lo que él proponía era el concepto de una cafetería como un “tercer lugar”: no es tu casa, no es tu trabajo, es un living público. Starbucks se convirtió en un lugar con sillones y baristas que reconocían a sus clientes. Se diferenció rápidamente del resto por vender un lugar de “pertenencia” además de café.
El crecimiento fue exponencial y ya para 1992 teniendo 165 locales salieron a la bolsa. No tardaron en llegar a Japón, Singapur y Europa, abriendo miles de locales al año, para 2007 ya superaban los 15.000 locales. Para ese entonces ya no ofrecían sólo un café, sino scons, sandwiches, wifi y baño gratis para los turistas. Starbucks se convirtió en una marca conocida a nivel mundial.
Todo iba viento en popa hasta que en 2007 por la crisis financiera la acción se desplomó y el consumo bajó. Para salvar la situación, Schultz puso un freno a todo este crecimiento y propuso que Starbucks vuelva a su esencia: cerró más de 900 locales entre 2008 y 2009, volvió a entrenar a 135.000 baristas en una tarde, sacó máquinas automáticas, empezaron a moler el cafe en los locales, sacó los sándwiches que tapaban el olor a café. Este “reset” en plena crisis funcionó.
El menú nada tenía que ver con esos bares italianos que tanto lo inspiraron: Frappuccinos, Pumpkin Spice Lattes y bebidas frías como el iced latte. Starbucks buscó adaptarse a los cambios tecnológicos; en 2009 lanzaron la app y la Starbucks Card. La gente cargaba saldo en su tarjeta para pagar más rápido y sumar puntos, y ese dinero quedaba ahí en la tarjeta generando un negocio financiero para Starbucks. Con los años, casi la mitad de las compras de sus clients pasaron por este programa. Starbucks llegó a tener ~US$2.400 millones “parados” entre tarjetas y app. Por eso muchos dicen que más que una cafetería es un banco digital: entra la plata antes de que salga el café. Otro gran beneficio, es que con la app se quedan con todos los datos de qué piden sus clientes, a que hora, cada cuanto y donde. El efecto secundario de esta estrategia fue más pedidos online, zonas de retiro llenas, baristas corriendo y no dando a basto, menos sillas disponibles de gente esperando por su orden.
Cuando llegó la pandemia se enfocaron en los pedidos “drive thru” que es la opción para pedir o retirar el café por la ventana sin bajarte del auto. Ya existía antes del 2020 y venía creciendo pero con la pandemia se volvió su salvavidas. Los locales empezaron a tener todos pedidos “on-the-go” y menos gente sentada. Crecieron tanto con esta oferta que a fines de 2023, un ~30% de las compras en EEUU eran vía app, ~70% de los locales eran drive-thru y solo ~29% seguían como cafés tradicionales para sentarse y trabajar.
La pandemia dejó a Starbucks con un nuevo hábito: todo “para llevar”. Si bien al principio funcionó, la cuenta llegó después. El lado B fueron las colas eternas, zonas de espera llenas, menos contacto con el barista y la falta de la cultura y experiencia que la hizo crecer. Más velocidad, menos alma. Los que querían pedir un café y sentarse se espantaban con la cantidad de gente esperando sus pedidos. La app le prometía a sus clientes fieles “listo en 3 minutos” pero en la realidad eso no pasaba. Todo esto tuvo consecuencias.
A inicios del 2024, 1 de cada 8 usuarios abandonaba el pedido por la demora. Mientras tanto, los precios de sus productos subían. El latte promedio pasó de US$3,95 en 2020 a ~US$4,95 en 2024. Con la inflación pegando en todos lados, a sus consumidores fieles se les terminó la paciencia y empezaron a exigir mayor valor. Los locales perdieron su encanto, los precios no ayudaron y el no cumplir su promesa fue el combo que impactó el negocio. Desde el punto de vista operativo, los locales no daban a basto, tenían un menú enorme de más de 100 opciones, poco personal y mucha carga de trabajo. Las huelgas de sus empleados no tardaron en llegar. Tras seis trimestres seguidos con caída en las ventas, Starbucks tuvo que replantearse todo.
Brian Nicool, ex Chipotle, llegó como CEO en Agosto del año pasado presentando su plan “Back to Starbucks” que propone una idea simple: volver al café como un tercer lugar. Su ejecución empezó con las cosas básicas como volver a la barra de condimentos, dejar de cobrar extra por leches alternativas, incorporar un “smart queue” para hacer los pedidos y prometieron la mayoría de las bebidas listas en 4 minutos. Para que todos estos cambios sean posibles tuvieron que invertir en más equipos y horas trabajadas.
Otro objetivo era lograr que los locales vuelvan a sentirse como un café y no como una zona de espera, por eso volvieron a poner sillas, reaparecieron las tazas de cerámica para dar esa sensación de sentir el calor en las manos y peso, como en cualquier café. También tuvieron que aflojar con las promociones en la app. En el menú, cambiaron los panificados por opciones que se ven más artesanales y de calidad. Aún así, innovaron con una nueva bebida con ~15gr de proteína para tener una oferta alineada con la nueva obsesión de los americanos por la proteína, y uno de los productos más vendidos es el matcha latte.
Hace una semana el CEO anunció una reestructuracion de $1000 millones que incluye el cierre de ~1% de sus locales en EEUU (el de mi barrio lo cerraron esta semana), recortan ~900 puestos corporativos y arrancan la renovación de más de 1000 locales para que vuelvan a tener esa calidez que la hizo crecer. Quieren más madera, textura, mesas donde quedarse y menos áreas de espera (Esto suena muy parecido a lo que hicieron con Barnes & Noble para su gran comeback). Por supuesto que las noticias no fueron tomadas de buena manera y es de esperar. Hubo piquetes de baristas pidiendo mejores sueldos, más staff y protección (un dato que no suma pero tampoco resta, Mamdani estuvo presente en uno de esos reclamos)
No es solo la mala gestión del contexto anterior y el contexto económico que no ayuda (hoy pagar $6 dólares por un latte duele), también está el boom de las cafeterías de barrio que se ganan a sus vecinos por cercanía, ambiente del lugar y trato: te reconocen por tu nombre, hay buena música, te podés quedar a trabajar o ponerte al día con un amigo, no hay gente amargada esperando por su pedido mobile, el clima es otro. Aún así también hay cadenas de cafeterías como Dutch Bros y 7 Brew que vienen creciendo con su servicio especializado en drive-thru y las necesidades de los jóvenes: colas más rápidas, baristas con energía, menú hiperpersonalizable y precios más bajos que Starbucks sin bajarte del auto. Y a Nueva York llegó la cadena china Luckin Coffee con locales mínimos y sin caja porque todo se hace por la app, es 100% digital, el precio es parecido al de Starbucks pero con la cantidad de cupones y precios promo que regalan queda un 30% más barato. La idea es que solo vayas a retirar el café, no que te quedes a pasar el rato.
¿En qué se enfoca hoy el CEO? En volver a lo básico y hacerlo bien. Que el pedido salga en minutos, que los usuarios no abandonen la app, que las mesas vuelvan a llenarse y haya tiempo para el “hola, ¿lo de siempre?”. La conveniencia tiene que estar, sí, pero sola no alcanza. La apuesta es que Starbucks vuelva a sentirse como un café, no como una sala de espera. En el exterior, estabilizar el negocio en China y crecer. En EEUU, ordenar la operación y bajar la tensión con el equipo. ¿Puede Starbucks volver a sentirse un café?
🗞️EXTRA, EXTRA 🗞️
• OpenAI lanzó una red social para hacer y publicar videos con IA | En un par de días, la nueva app Sora llegó a ser #1 en el ranking del AppStore a pesar de que en la primera etapa se necesita un código de invitación para poder usarla. Aparte de incluir su nuevo modelo de generación de video, Sora 2, la app te deja clonar tu apariencia, la de tus amigos o cualquier persona que autorice, para crear videos.
• Por qué tantos estadounidenses se aferran a sus trabajos | La gente se está aferrando a su trabajo por miedo, más estrés y menos movilidad interna. En EEUU, 4 de cada 5 personas no se sienten bien en su trabajo y el 58% dice que sus skills están desaprovechadas. Las empresas no despiden masivamente, pero frenan la contratación y achatan equipos. Con menos oferta de trabajo, cae el poder de negociación de los empleados y los salarios dejan de crecer. Los más complicados son los perfiles junior. Desde Abril del año pasado EEUU perdió más de 1.2 M de empleos, el “quits rate” bajó 2% y la contratación está en su nivel más bajo desde 2013 (sin contar la pandemia).
Vintage People.
En un momento donde todo llega en 48 horas y se ve igual, el verdadero lujo dejó de ser lo nuevo. Hoy no se trata de cuánto pagaste o que famoso lo usó, sino la historia de cómo encontraste ese jean perfecto en un closet sale un Martes a las 8 AM, o la remera de un recital que te consiguió la chica del WhatsApp. Eso cuenta más que un unboxing de una marca de lujo.
¿Por qué? Porque la moda se saturó. Entre fast fashion y compras algorítmicas, todos terminamos con la misma campera viral. La reacción lógica fue buscar diferencia real: piezas únicas, con historia, con fallas lindas. Algo que no te pueda sugerir una influencer. Un vestido archival de diseñador o una cartera de los 90 vale por lo que es y por el cuento que traen.
También influye el contexto económico. Las marcas de lujo no están viendo crecimiento en sus ventas porque la gente hoy tiene otras prioridades, con la inflación la gente ya no encuentra sentido en pagar $1800 USD por una cartera de nylon Prada que tienen todas las influencers, y que ya no se distingue si es fake o no.
El gasto grande estacional se cambió por lujos chicos pero con sentido. El mercado vintage o “pre-loved” encaja perfecto con este cambio cultural: calidad, mejor precio y, si te cansás, lo pones en reventa. Para los jóvenes las carteras o ropa vintage tienen “mística”.
Por supuesto que también impacta la “eco-culpa”. Los Gen Z y millenials (sobre todo los más jóvenes) quieren verse bien sin comprar descarte o fast-fashion. Reusar y reparar pasaron de obligación moral a estética. Lo viejo bien elegido se siente más cool que lo nuevo genérico, tiene estilo y personalidad. Y si encima esa pieza duró 20 años, mejor, probó que vale la pena invertir en ella.
Después está el factor humano, esa emoción y adrenalina que da encontrar una “joyita”. Comprar ya no es un trámite en Zara que no te devuelve satisfacción y lo hacés para cumplir con la moda de la temporada. Es levantarse temprano para ir a hacer la fila del sample sale, ir al open closet de una persona con estilo, entrar a un depósito polvoriento, o abrir un Google doc con links escondidos de hallazgos de otra persona. Y cuando aparece el hallazgo, te queda una anécdota para siempre: “lo encontré en un vintage en París”, “era de mi abuela”, “lo conseguí por dos mangos en eBay Japón”. No es solo el objeto; es la aventura.
Las famosas también se subieron a este trend. Kylie Jenner por ejemplo apareció este verano con un set de archivo Ralph Lauren. Las celebridades van a los Oscars con vestidos diseñados hace 40 años y hasta mismo podemos mencionar el caso de Kim Kardashian usando el icónico vestido de la gran Marilyn Monroe. No se trata de ir a un diseñador y exigirle un diseño único, personalizado y caro. Se trata de abrazar y valorar piezas únicas de gran calidad.
Hay un submundo del vintage que, los que no estamos tan metidos en esta onda, desconocemos. Yo creí que por saber qué es TheRealReal o entrar en un second-hand de mi barrio más o menos entendía de qué se trataba esta tendencia, pero no, estoy bastante out y todo esto que menciono es lo más “comercial”. ¿Dónde compran las chicas fans del second-hand? Bueno, como todo nicho, tiene su comunidad en grupos de Whatsapp donde te avisan que entra cada día, los precios, y los talles. También hay especialistas que en Close Friends de Instagram comparten sus hallazgos y links para comprar. Ni hablar de la existencia de Google Docs con links y detalles de cada ítem. Y por supuesto, la comunidad amante del vintage llegó a los newsletters donde las autoras te enseñan a cómo rastrear joyas perdidas. El valor de estas comunidades es que te ahorran tiempo y no competís contra el algoritmo o grupos más grandes mirando la misma cartera. Juegan una liga más exclusiva. Dato no menor, la hija de Bill Gates es una amante de lo vintage, no solo le saca a su mamá Melinda las carteras Dior que usaba en los 90s, también sigue todas estas comunidades para conseguir esos tesoros. Una persona que podría ir a Miu Miu y comprarse toda la colección de moda aspiracional, elige encontrar prendas ya usadas y de la mejor calidad.
El estatus entonces ya no se trata del precio o la última colección, ahora es rareza y relato. ¿Cuánto sale? importa menos que de dónde salió. Y ojo, no es solo ropa: lámparas setentosas, vajilla italiana, muebles art deco (acá si conozco un poco más, tengo mis lugares predilectos en Upstate, NY). Todo suma si tiene carácter.
Esto no significa que lo nuevo murió, significa que lo nuevo sin alma aburre. Las marcas que entienden la tendencia hacen tres cosas: 1) bajan velocidad de producción o lanzan ediciones limitadas, 2) suben curaduría y 3) cuentan el origen. “De qué taller viene”, “por qué ese tejido”, “cuántas unidades hay”. Diseñan para durar y, si pueden, dejan el camino marcado para la segunda vida del producto. De paso, alimentan su propio mercado de reventa. Win-win.
¿El resultado de todo esto? Comprar deja de ser un scroll infinito. Menos hauls, más anécdotas. Menos trend, más autenticidad.
Decodificando “The Life of a Showgirl” para no-swifties
Disclaimer: este post NO es para swifties ni está escrito por una. Quiero explicar el fenómeno Taylor Swift para quienes no viven en ese universo y contarles por qué todo internet habla de The Life of a Showgirl.
Ya venimos del bombardeo por el anuncio del compromiso de Taylor, que fue el tema en redes y medios tradicionales a nivel global. La noticia salió en pleno horario laboral y la productividad se fue al piso porque todos estaban online intentando conocer más detalles; en redes decían que “fue como Navidad, Black Friday y el Super Bowl para mujeres de 25 a 40”. Para que los argentinos entiendan la situación, fue como estar en pleno Mundial y que juegue Argentina: todos con eso en la cabeza y desconcentrados del trabajo. Y, ya que hablamos de fútbol, la foto de Taylor y Travis pintaba para convertirse en la más likeada de la historia y destronar a Messi con la copa del mundo (+70 millones de likes). Taylor, en una hora, ya tenía 9 millones. Por suerte hubo boicot: no likear o sacarle el like a Taylor. El vestido, Ralph Lauren, en pleno comeback como hablamos la semana pasada, se agotó en minutos, subieron las acciones de joyerías y en EEUU ya fantasean con efecto cultural: más casamientos, más bebés. El año pasado se habló de la Swiftonomics: su Eras Tour con el cual se estima que generó más de US$2 mil millones e inyectó más de US$10B en la economía. Cierro paréntesis: no vengo a contar cada uno de los logros de Taylor Swift, sino a contar qué pasa y por qué otra vez todos hablan de ella.
A la medianoche del 3 de octubre Taylor lanzó su nuevo álbum The Life of a Showgirl y, por un rato, el mundo giró a su alrededor. No fue simplemente “sale un álbum”, fue un estreno global con una idea clara: contar lo que le pasaba fuera del escenario en pleno Eras Tour. Doce temas cortos donde conviven el enamoramiento con Travis Kelce y el costo de vivir bajo la lupa. El primer récord que rompió fue en Spotify: confirmaron que fue el album más escuchado en un día de 2025 y que “The Fate of Ophelia” rompió el récord histórico de streams en 24 horas para una canción. En YouTube las 12 canciones ya tienen entre 1,5 y 4 millones de views cada una en menos de 24 horas y no son los videos oficiales, sino “visualizers”. Para los videos oficiales hay que esperar. Reportes iniciales hablan de +500M de streams globales en 24 horas, ~100M en Spotify EEUU., y entre 1,5 y 2 millones vendidos entre físico y digital el día uno.
En redes también fue una revolución: +10 millones de menciones y #TheLifeOfAShowgirl como tendencia todo el día. Hasta subió el tráfico a los sitios de música y hubo empresas midiendo “ausencias” de sus empleados por este estreno. Claro: todos escuchando cada letra e intentando descifrar para quiénes están dedicadas y qué quieren decir.
Las canciones traen nombres y guiños para todos: “Elizabeth Taylor”(joyas, Hollywood y el precio de la fama, en espejo con su vida), sus deseos en “Wi$h Li$t”, donde compara “firmar con el Madrid” con sueños XXL tipo ganar un Oscar o la Palma de Oro. No es random: en mayo de 2024 hizo sold out de dos Bernabéu (130.000 personas). El Real Madrid subió el tema a sus redes apenas salió. También está “CANCELLED!”, donde habla de amigas canceladas; la conversación en redes es hacia quién estará dedicada y si es a Blake Lively (y no es solo en redes: hasta los noticieros levantaron la especulación). Otra que encendió el chisme fue “Actually Romantic” y muchos creen que está dedicada a Charli XCX (al parecer no se quieren y se tiran indirectas con canciones).
El lanzamiento fue 360. Además del álbum, llega The Official Release Party of a Showgirl a los cines y, solo con preventas y fiebre del día, factura en un fin de semana unos $30 millones en 3.700 salas. Dress code swiftie, funciones llenas, videos, detrás de escena y un relato que saltó de Spotify a la pantalla grande.
En 24 horas, Taylor metió récords, conversación, memes y facturación a no parar. Un álbum corto, una narrativa única y un estreno diseñado para que el mundo hable de lo mismo al mismo tiempo.
🗞️EXTRA, EXTRA 🗞️
• Una foto de la hija de Steve Jobs se volvió viral en redes | Eve Jobs se volvió viral en X sin buscarlo. Una foto de su carrusel en Instagram desde el Milan Fashion Week junto a Bottega Veneta revolucionó las redes por su aspecto. Los comentarios se llenaron de elogios. Y aparecieron las teorías sobre su nombre, la relación entre “Apple” y “Eve” (Eva).
Emprendedores de ayer y de hoy.
David Senra es una voz autorizada en el mundo de los negocios y el emprendimiento. Tiene un enfoque singular que lo distingue de la oferta habitual de contenido; convierte el estudio riguroso de la historia en lecciones prácticas de negocios. Senra no es solo un podcaster, es un obsesivo que se dedica a divulgar la sabiduría de los grandes emprendedores de la historia.
Durante casi una década y antes que sea moda, Senra hizo crecer su podcast principal, ‘Founders’. Su metodología es su mayor diferenciador: lee una biografía o autobiografía de un gran fundador cada semana y destila sus aprendizajes esenciales en un episodio. Con más de 400 episodios dedicados a figuras históricas y empresariales (Rockefeller, Andrew Carnegie, Steve Jobs, Walt Disney entre otros), Senra busca identificar el ADN de la grandeza, las mentalidades, los patrones de comportamiento, y la obsesión que permitieron a estos personajes crear empresas exitosas.
La semana pasada, David Senra amplió su contenido con el lanzamiento de su segundo podcast, ‘David Senra’. Este nuevo programa es un complemento directo a ‘Founders’, cambiando la perspectiva del análisis histórico a la conversación en tiempo real. Se centra en hacer entrevistas extensas y profundas con los fundadores vivos más influyentes de la actualidad, aprovechando la llegada que hoy tiene a emprendedores famosos como consecuencia del éxito de su primer podcast.
En su episodio debut, Senra entrevistó a Daniel Ek, cofundador y CEO de Spotify, en una charla de 2 horas donde compartieron conceptos que guiaron a Daniel en su carrera:
• Por qué optimiza por impacto vs. felicidad.
• Juzgar a las personas por sus mejores ideas.
• Aprender no es memorizar información, es cambiar comportamientos.
• Lo importante no es cómo jugar el juego, sino elegir bien qué juego querés jugar.
• La calidad nunca es un accidente, es el resultado de esfuerzo + inteligencia.
• Solucionar problemas = crear valor, y por lo tanto el valor de una empresa es la suma de los problemas que resuelve.
🗞️EXTRA, EXTRA 🗞️
MrBeast tiró una perlita retro: anunció que el 4 de Octubre va a publicar un video que grabó en 2015, cuando apenas tenía 8.000 suscriptores y que agendó para que se publicara 10 años más tarde, es decir ahora en 2025. Después de acostumbrarse a verlo en producciones millonarias, sus fans van a verlo en “modo garage”.
• Laguna Beach Reunion | Roku prepara Laguna Beach Reunion para 2026, a 20 años del estreno en MTV. Vuelven Lauren Conrad, Stephen Colletti, Kristin Cavallari y el elenco original en un especial con anécdotas inéditas y regreso a Laguna Beach.